Disney reconoce que los «Baby Einstein» no son educativos

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Fuente: La Voz de Galicia.es
Devolverá a los padres estadounidenses el dinero de los vídeos, cuya publicidad aseguraba que hacían más listos a los niños

La compañía Disney está devolviendo el dinero de los vídeos y deuvedés de la serie Baby Einstein para no tener que enfrentarse a una demanda ante los tribunales. La serie está formada por audiovisuales con música, marionetas, colores, formas y palabras sencillas destinados a bebés de menos de dos años. Comenzaron a comercializarse en 1997 y el éxito fue tan grande que se calcula que en Norteamérica uno de cada tres niños de entre seis meses y dos años ha visto uno o varios de estos programas.


Disney, que compró Baby Einstein en el 2001, añadió a la colección libros, juguetes, cartas y nuevos vídeos, bajo las marcas Baby Mozart, Baby Shakespeare y Baby Galileo. Ahora ha anunciado que devolverá el dinero que costaron los deuvedés -hasta cuatro por familia- o los cambiará por otros de sus productos. Detrás de esa decisión está la asociación Campaña para una Infancia sin Publicidad. Esta oenegé denunció en el 2006 que los vídeos no eran educativos. La Comisión Federal de Comercio estuvo de acuerdo con las tesis de la asociación y Disney retiró la palabra educativos de sus vídeos, aunque siguió vendiéndolos. Pero la Campaña para una Infancia sin Publicidad quería que la empresa devolviera el dinero a los padres. Se pusieron en contacto con un grupo de abogados de Boston especializados en salud pública. Y estos amenazaron a Disney con ir a los tribunales si no devolvían el dinero de los deuvedés.


Y es que los abogados tienen un argumento de mucho peso. Además de que la publicidad de los audiovisuales pueda insinuar que los niños que los vean serán más listos (y eso no tiene ninguna base científica), está una recomendación de la Asociación Americana de Pediatría que aconseja que los niños menores de dos años no miren una pantalla, ni de televisión ni de ordenador. Y es que, según los expertos, eso podría aumentar las posibilidades de que el niño sufra déficit de atención más adelante.


La amenaza ha surtido efecto. Si los vídeos o deuvedés se compraron entre el 5 de junio del 2004 y el 5 de septiembre del 2009, la empresa devolverá 15,99 dólares por cada uno. Y los padres tienen hasta el próximo 10 de marzo para cambiarlos.